Movilidad de las tropas será prioridad en gasto de $8,2 billones recogidos por impuesto de guerra


Uno de cada tres pesos pagados por los contribuyentes del impuesto al patrimonio se destinará a la compra de aviones, helicópteros, botes y vehículos en tierra.

El Ministerio de Defensa prepara una serie de licitaciones con las que espera consolidar la política de Seguridad Democrática y organizar la estructura de las Fuerzas y la Policía por las próximas tres décadas.

Una de las tareas urgentes será 'blindar' en la medida de lo posible el movimiento de las tropas, precisamente el flanco más golpeado por los ataques de la guerrilla en los últimos años.

Los recursos llegan, además, en un momento clave. Es prioritario asegurar las zonas desalojadas por los grupos 'paras' desmovilizados. En ese escenario entrarán a jugar cerca de 40 mil nuevos soldados y policías.

Además -dice Jorge Restrepo, director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos, Cerac- cuando los resultados de la política de Seguridad Democrática parecen haber llegado a su máximo.

"Estamos ante un nuevo punto de quiebre en el conflicto y la tecnología es la clave. Ya no es tan necesario aumentar el pie de fuerza tanto como hacer más con los hombres que se tienen -dice Restrepo-. Eso se logra con tecnología y movilidad".

Buscan controles contra la corrupción

Por ahora, la única compra aprobada es la de 15 helicópteros Black Hawk que se hizo de gobierno a gobierno con Estados Unidos y que está destinada a fortalecer la Aviación de Ejército.

El ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, aseguró que un tema vital en esta inversión -que empieza con las licitaciones para compra de armamento de asalto para las Fuerzas Especiales- es que el proceso esté totalmente blindado contra la corrupción.

Se crearon tres comités con dos tareas prioritarias: evitar irregularidades en las compras y, además, velar porque los elementos que se adquieran sean los que realmente necesita cada fuerza.

El primer comité es el de Análisis y está integrado por los segundos comandantes de la cada fuerza, además de un delegado del Ministerio de Defensa, de Planeación Nacional y el Ministerio de Hacienda.

El segundo comité es el de Ética y Transparencia. En él participan algunos de los empresarios que pagan el porcentaje más alto del impuesto al patrimonio y asisten como invitados el Contralor y el Procurador.

Las compras tendrán un último filtro -el 'Acuerdo de Comandantes'- en el que el jefe de cada fuerza, el Ministro y los viceministros de Defensa darán el último sí.

Además, un grupo de abogados, ex consejeros y los ex ministros de Defensa Luis Fernando Ramírez y Gustavo Bell Lemus, que serán garantes y revisores del proceso.

La Inteligencia, tal vez el flanco más importante dentro de todo este paquete y que tendrá una reestructuración lesgislativa, recibirá el 10 por ciento del impuesto.

'Es la inversión más grande en 30 años', dice Juan Carlos Pinzón, viceministro de Defensa

¿Qué significa para el país la inversión de 8,2 billones?

Estos recursos son históricos, pues son los más grandes en 30 años. Esto le debe permitir al país dos cosas: de una vez por todas cerrar la confrontación con esta amenaza del narcotráfico y terrorismo y generar la estructura de las Fuerzas Armadas para los próximos 30 años.

¿Qué es lo más importante de toda la inversión?

La movilidad, pie de fuerza e inteligencia más el sostenimiento de todo.

¿A futuro se comprarán los aparatos que no se pudieron adquirir con esta plata?

Como está diseñado el proceso de inversión, es posible extender la vida útil de mucho material que está viejo y poder tenerlo unos 10 o 15 años más. Es indudable que en ese tiempo el país tendrá que hacer una discusión profunda sobre qué cosas requiere y si debe hacer inversiones adicionales.

¿Los logros en la Fuerza Pública se siguen midiendo por bajas o por otro tipo de resultados?

No. En esta política de consolidación el tema central es cuánto territorio se controla y, sobre todo, de qué manera se controla.

Obviamente hay zonas donde aún el Estado tiene que llegar con fuerza para imponerse sobre los grupos al margen de la ley. En la medida en que esto se haga, se abrirán espacios para que el resto del Estado desempeñe su papel.

Tres factores claves para la movilidad de las Fuerzas Militares

La aviación del Ejército

La operatividad en el Ejército tendrá un giro fundamental con la movilidad.

En el análisis que hizo el Ministerio se llegó a la conclusión de que el número de hombres creció, pero los medios para transportarlos, sobre todo en la selva, estaban muy por debajo.

Así, la Aviación de Ejército se reforzará no solo con los helicópteros Black Hawk y M-I rusos, sino con aviones pequeños de control.

De otra parte, se consolidarán los batallones permanentes en municipios como Uribe y La Macarena (Meta), donde estaban operando brigadas móviles.

Un porcentaje de la inversión en el Ejército está destinada a la construcción de bases militares. Una de las primeras se levantará en la histórica inspección de La Julia, en el Meta.

Así mismo, habrá una 'remodelación' de los equipos de artillería que tiene la institución: obuses, cañones y morteros.

Una de las fortalezas del Plan, dice el Viceministro, es que las compras de este año, por primera vez, tienen aseguradas partidas para mantenimiento y reposición.

La movilidad en los caños

La gran falencia que el Ministerio encontró en cuanto a la movilidad de la Armada fue la falta de maniobra en los afluentes (riachuelos y caños) de los grandes ríos que servían como 'autopistas' a la guerrilla.

Por eso, habrá una significativa inversión en la compra de pirañas y botes más pequeños que puedan acceder a estos puntos.

Así mismo, se repotenciarán las fragatas y submarinos que actualmente cumplen labores de vigilancia e inteligencia en la costas.

Y un aspecto que anteriormente los militares no habían contemplado, pero que se convirtió en una iniciativa que está promoviendo el ministro Santos, es la adquisición de helicópteros que apoyen la tarea de las nodrizas.

Esto buscaría tener un mayor radio de acción en la lucha contra el narcotráfico, tanto en la parte fluvial como marítima.

También habrá un fortalecimiento de la parte técnica de la inteligencia de la Armada, que en este momento es la que mejor funciona dentro de las Fuerzas Militares.

La FAC tendrá 2 nuevas bases

Un punto en el que coinciden los analistas es que la ventaja de la Fuerza Aérea en el campo de combate la han marcado los helicópteros de ataque.

Por eso habrá una inversión en aeronaves que apoyen los Arpía 3 (Black Hawk artillados) y Rapaz (Huey), que han sido determinantes en los golpes que se han propinado a las Farc en los últimos años, como la muerte de los jefes guerrilleros alias 'J.J.' y el 'Campesino'.

Así mismo, la movilidad de tropas entre bases militares se volvió indispensable, por eso se comprarán algunos aviones grandes y medianos para mover a los batallones de contraguerrilla.

Otro rubro del presupuesto se destinará para el entrenamiento de las tripulaciones y la capacitación, en diferentes áreas, de los pilotos de combate.

La Fuerza Aérea también habilitará dos nuevas bases aéreas, para completar siete, en Leticia (Amazonas) y Yopal (Casanare).

También hay presupuesto para revisar y repotenciar los aviones K-Fir y Mirage.

JINETH BEDOYA LIMA
Redactora de EL TIEMPO