Cartagena de Indias: Blas de Lezo y la invencible inglesa
domingo, marzo 01, 2009 at 9:01 a. m.
Labels: Arqueología, colombianos, Ejercito de Colombia, Historia 0 comments
COLOMBIA: Would you take the risk?
jueves, abril 03, 2008 at 8:28 a. m.
Labels: Amazonas, Ambiental, Arqueología, Arte, boxeo, Café de Colombia, Ciclismo, colombianos, Cultura, Deporte, Ejercito de Colombia, Fronteras, Historia, Humor, Montañismo, música 0 comments
Los ocho cientificos colombianos mas buscados en la web
miércoles, noviembre 21, 2007 at 8:13 a. m.
- Ángela Restrepo
Una rara enfermedad parecida a la tuberculosis, producida por un hongo que afecta solo a América Latina cautivó la atención de esta investigadora que lleva más de 40 años al servicio de la ciencia.
La detección tardía de este mal motivó los trabajos que llevaron luego a establecer procedimientos diagnósticos certeros y que condujeron a tratamientos para combatir el efecto del Paracoccidioides brasiliensis, nombre científico del hongo.
Ángela ha participado en más de 300 investigaciones cuyos resultados han sido incluidos en publicaciones científicas.
Desde la Corporación para Investigaciones Biológicas, en Medellín, contribuye al país con la formación de jóvenes interesados en la labor científica.
- Carlos Arturo Ávila
Este físico e ingeniero eléctrico ha centrado su trabajo desde hace 20 años en el estudio de los componentes fundamentales de la materia, objetivo de la física experimental de altas energías.
Choques a gran velocidad entre partículas atómicas logrados a través de instrumentos de aceleración le permiten descifrar su estructura interna. El uso de esta técnica ha impulsado, entre otros, tratamientos contra el cáncer.
Los trabajos del grupo de investigación de Ávila han marcado un impacto tan alto en la comunidad científica, que incluso documentos publicados hace más de 10 años siguen siendo altamente citados por investigaciones científicas actuales. Además, ha contribuido a la interacción entre grupos de investigación de diferentes países.
- Francisco Lopera
Para este neurólogo clínico de la Universidad de Antioquia, el hallazgo de las mutaciones 'paisas' del Alzheimer juvenil, el parkinson y otras enfermedades neuronales constituye su mayor logro. El premio Nacional de Medicina que recibió en 2002 lo corrobora.
Se trata de variaciones de estas enfermedades que se presentan únicamente en Antioquia, pero que tienen tal impacto que su hallazgo genera oportunidades para buscar la cura para estos males en todas sus variedades en el mundo.
A través de sus investigaciones, Lopera ha obtenido resultados sorprendentes como la identificación del cadasil, una deficiencia vascular hereditaria que produce trombosis cerebrales repetidas y puede conducir a la demencia, y que en América Latina afecta solamente a cuatro familias antioqueñas y una argentina.
- Manuel Elkin Patarroyo
Es uno de los científicos más reconocidos del país por las investigaciones que lo condujeron al desarrollo de la primera vacuna sintética contra la malaria, con una eficacia de entre el 30 y el 50 por ciento, y sus posteriores esfuerzos para el mejoramiento de la misma.
El médico de la Universidad Nacional ha basado su trabajo en inmunología para la tuberculosis, la leishmaniasis, la hepatitis, y últimamente, en los métodos diagnósticos para la infección por el virus que causa el cáncer de cuello uterino.
- Roberto Pineda
Lograr el reconocimiento de grupos indígenas, cuyo origen es fruto de la reconstrucción cultural tras el 'holocausto del caucho', enorgullece a este antropólogo e historiador, que ha dedicado 30 años al estudio de las comunidades en el Amazonas. Fue director del Instituto Colombiano de Antropología y tiene unos 80 artículos publicados, entre los que se destaca Holocausto en el Amazonas.
- Jairo Quiroga Puello
La obtención y caracterización de sustancias sintéticas que pueden usarse para combatir hongos, tumores, tuberculosis e incluso algunos virus, es el asunto que ocupa los días de este químico orgánico del Grupo de Investigación de Compuestos Heterocíclicos de la Universidad del Valle.
Las investigaciones que ha realizado con su equipo de trabajo, creado en 1992, lo han llevado a publicar 135 artículos y ensayos relacionados con la química orgánica y la química medicinal, que busca la aplicación de los conocimientos químicos en pro de la salud humana.
Además, durante sus prácticas de laboratorio, el grupo ha empezado a utilizar la 'química verde', denominada así por su aporte en la disminución de la contaminación.
- Joseph M. Tohme
Este investigador de origen libanés se ha dedicado a estudiar la diversidad genética de alimentos como el fríjol, yuca, arroz y frutales desde el proyecto de Agro biodiversidad y biotecnología del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), con sede en Cali. Sus trabajos han permitido entender la respuesta de las plantas en suelos ácidos y la forma como se nutren e interactúan con los insectos, así como la identificación de genes para la resistencia a enfermedades de los sembrados. Además, ha aprovechado la tecnología para mejorar la salud de la población, a través de cultivos fortificados para combatir la malnutrición.
- Jorge Orlando Melo
Es licenciado en filosofía y letras de la Universidad Nacional y tiene estudios de historia latinoamericana de las universidades de Oxford y North Carolina.
Sus estudios giran alrededor de la historia colombiana desde la conquista hasta días recientes.
Del total de sus investigaciones, tiene más de 70 artículos y cuatro libros completos publicados en Internet. Recibió el Premio Nacional de Ciencia Alejandro Ángel Escobar por su trabajo Historia económica de Colombia, realizado en compañía de José Antonio Ocampo. Fue consejero presidencial de derechos humanos en el gobierno de César Gaviria, y director de la Biblioteca Luis Ángel Arango hasta hace dos años.
CAROLINA LANCHEROS
REDACTORA DE VIDA DE HOY
Labels: Amazonas, Arqueología, colombianos, Tecnología 0 comments
Que Chévere ser colombiano...
miércoles, septiembre 12, 2007 at 11:58 a. m.
Por Fernán Martinez Mahecha
Cada vez que menciono que soy colombiano, los ojos de los presentes, se soplan como sapo en celo, mientras me miran con sospecha.
Si lo digo en un aereopuerto, me revisan una y otra vez mis maletas, me decomisan los encargos de la abuela, me preguntan por la caída de los narcos, quieren saber si van a extraditar a los Orejuela, y aún se atreven a preguntarme por “el patrón”, como si se les hubiese olvidado que van a hacer varios años que le dieron de baja en un tejado de Medellín.
También me preguntan si es verdad que en los solares de las casas hay sembrados de amapola y marihuana.
Recién llegado a este país me daba mucha rabia. Pero ahora, antes de enojarme pienso de los problemas que tiene el país de donde viene el ofensor...
De tal manera, que si son estadounidenses, no les pregunto por el famoso alcalde de Washington, Marion Barry, arrestado por el FBI mientras se tupía la nariz, ni por el coronel Oliver North- el de los canjes de cocaína por armas para los contras nicaraguenses- naturalmente, con el consentimiento del pacífco presidente Ronald Reagan.
Si son brasileros, no les hablo del SIDA que abunda en su país. Si son de Argentina, ché! ni loco y ni pensar en comentar los rollos de Carlitos Menen, y menos del vicioso de Maradona (y otros Futbolistas), su confesión de drogadicto empedernido, y sus fenomenales despedidas.
Chico! Si son cubanos, prefiero evadir el eterno, agobiante, trillado tema Castro. Los de acá dicen que es un tirano y los de allá aseguran que es un bacano!
Si son los vecinos mexicanos, ni modo de platicarles del ex-presidente Carlos Asaltinas de Gastari y su ejemplar familia, disfrutando hoy de su bien tumbada fortuna.
Si de Panamá son oriundos, no les amargo el rato recordándoles las payasadas del General Noriega, hoy tras las rejas.
Si son alemanes, mucho me cuido de no mencionarles al bárbaro Hitler y sus despiadados holocaustos.
Bueno, como ven, así podría citar al resto del mundo, porque como reza el dicho popular, en todas partes se cuecen habas.
Jesús diría: Quien esté libre de culpa, que arroje la primera piedra. Además cada país vive su propia angustia.
Todas las naciones tienen su historia y no por ello, sus ciudadanos tienen que arrastrar con esas cadenas... con las secuelas de su escoria.
Por esta razón cuando se refieren despectivamente a Colombia por aquello del “narcotráfico”, comienzo a hablarles de los 42 millones de sus habitantes honrados y echados para adelante, que sueñan con tener una patria libre y soberana.
De los grandes y famosos, les menciono nuestro premio nobel de literatura Gabriel García Márquez; les hablo también de los maestros Degreiff, Caballero, Obregon, Negret, Gordillo, Moralez, Ramirez, Grau, de Fernando Botero y sus gorditas que engalanan museos Europeos o que cotizan sofisticadas mansiones de ricos y famosos. Y claro, no olvido a la talentosa Shakira, que ha hecho con 2 discos, lo que cientos de grupos mejicanos no han podido hacer en años, sacar la cara por el rock en español.
Cuando aún no he terminado de enumerarles las cosas buenas que tiene ese país maravilloso, no sólo por sus riquezas naturales, si no por la calidad humana de sus gentes, mis nerviosos interlocutores extranjeros se van tranquilizando y hasta les dá por invitarme a sus casas, claro está, ya sin observarme como bicho raro.
Si después de todo, persiste la duda y el recelo contra la palabra colombiano, les hago hincapié en cosas más sencillas como por ejemplo, que en Colombia crece la fauna y flora más exótica del mundo entero, que corren ríos de aguas cristalinas surcando tres cordilleras, que las frutas huelen y saben a frutas, los pollos a pollo, y la leche a leche.
Les aseguro que si alguien abre un hueco, lo más probable es que halle una esmeralda, una veta de oro, un pozo de petróleo; é inclusive, una vasija de barro repleta de joyas, enterrada por los primeros colombianos, 500 o 600 años atrás.
Hay quienes suponen que exagero cuando afirmo que en Colombia existen más mujeres hermosas por kilómetro cuadrado que en el resto del planeta. Que los colombianos cuentan con el sistema democrático más antiguo del continente americano. Que los campesinos silban y cantan alegres mientras llenan sus canastas de pepitas rojas, las mismas que en USA las llaman “Colombian Coffe”. Les cuesta creer que los compositores y los poetas se dan silvestres como el maracuyá. Que el aire está preñado de bellos ritmos que engendran igualmente cumbias, porros, vallenatos, bambucos y torbellinos. ¡Si nó que le pregunten a Carlos Vives!
Entonces, después de oir tantas cosas bonitas juntas, se olvidan de los narcotraficantes y su terrorismo; de los paramilitares y sus matanzas, de los secuestradores y su facismo. Y cuando ven en la televisión y los periódicos imagenes de ese pedacito malo de Colombia, rápido se recuerdan que el 99% de su gente es pulcra, honrada, que todavía hay estudiosos Patarroyos, Llinases, Y Buendias. Que todavía hay galanes caballeros que dan serenatas y envian flores a sus enamoradas. ¡En ese momento se dan cuenta de que todo lo malo que está trascurriendo en la bella Colombia, es pasajero!
Por eso compatriota, cada dia debemos estar más orgullosos de nuestra tierra, de nuestra herencia, pero sobre todo, del mejor regalo de nuestras vidas, haber nacido en Colombia.
¿Te sientes mejor despues de leer a este chibchombiano alborotao ?.... qué lindo saber que hay gente que mantiene viva la fe y el amor por su terruño y no deja que nada ni nadie opaque el orgullo que se siente en ser colombiano.
Repartamos este mensaje de fuerza y esperanza, para que la gente se de cuenta de que no todo es malo, para que el mismo colombiano pueda concentrarse en las cosas lindas de su país, y sentirse orgulloso de hacer patria alrededor del mundo
Hallazgo arqueológico fue encontrado en lugar donde el CTI esperaba encontrar una fosa común
martes, mayo 15, 2007 at 8:17 a. m.

En una cueva de Gámeza (Boyacá) aparecieron restos de dos niños y una mujer muiscas, que según los expertos tienen 500 años
Un campesino llegó hasta la cueva, atraído por el nido de un águila. Descubrió los restos entre rocas y grietas e impactado bajó hasta el pueblo y dio aviso a la Policía.
Los agentes del CTI concluyeron que se trataba de una fosa común, a propósito de un enfrentamiento que se produjo en ese sitio entre la Fuerza Pública y guerrilleros de las Farc, que intentaron tomarse el pueblo hace 8 años. Ese día, varios guerrilleros murieron.
Alertados por los policías, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía de Sogamoso envió a un grupo de detectives hasta el sitio.
Por las dificultades del terreno, a la cueva solo pudieron llegar el investigador Juan Gabriel García Murcia y un agente de la Policía, quienes se llevaron una sorpresa más grande que la del campesino.
En vez de fosas comunes y restos de combatientes, encontraron lo que podría convertirse en uno de los tesoros arqueológicos más importantes de Boyacá.
Las primeras indagaciones indican que se trata de restos indígenas con más de 200 años de antigüedad.
El hallazgo incluye el cuerpo de un niño envuelto en una manta, un cráneo, la parte inferior de una mandíbula y varios huesos.
El médico forense Néstor Castillo, quien analizó los restos, aseguró que en ellos no existe señales de violencia.
Según explicaron en el CTI, al médico le llamó la atención que el cuerpo envuelto presentaba momificación. Por eso, él conceptuó que el niño habría vivido hace más de dos siglos.
Castillo sugirió a los investigadores remitir los huesos a la sección de Antropología del Instituto Nacional de Medicina Legal de Bogotá.
El cuerpo momificado se parece bastante a las momias que se conservan en el Museo Arqueológico de Suamox, en Sogamoso.
Por eso, los investigadores decidieron pedirle un concepto al fundador del museo, el antropólogo Eliécer Silva Celis. El experto confirmó que pertenecen a los muiscas.
Familia con linaje
La directora del museo, Margarita Silva, dijo que los huesos son de tres individuos: de un bebé que murió en el vientre de la madre, de un niño y de una mujer joven.
Agregó que el cuerpo del bebé tiene alrededor del cuello tres cordones y una bolsita. Está envuelto en una manta y fue sepultado con una totuma muy pequeña, que se utilizaba como ofrenda.
Al parecer, integraban una familia de alcurnia, porque fueron sepultados en un sitio de difícil acceso y encumbrado en las montañas.
En el museo manifestaron que los restos pueden tener más de 500 años, ya que los muiscas habitaban el altiplano cundiboyacense a la llegada de los españoles.
Labels: Arqueología 0 comments