Federación de Cafeteros de Colombia demandó a empresa costaricense (Britt) por uso ilegal de la marca Juan Valdez

Café Britt, una de las marcas más representativas de ese país, uso el mensaje “Juan Valdez toma café de Costa Rica”, para promocionarse.

Camisetas con el mensaje y con el nombre y logo de Juan Valdez comenzaron a venderse en las tiendas de esta cadena, las cuales además eran hechas exclusivamente para Café Britt, según dice la marquilla.

El 12 de diciembre del año pasado, la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia se percató del asunto cuando compró una de ellas y con esta prueba en mano se inició un proceso contra la firma contarricense.

Según el director de la oficina de Propiedad Intelectual de la Federación, Luis Fernando Samper, se le propuso un acuerdo a la empresa, el cual fue aceptado por el propio Pablo Vargas, gerente de Café Britt, quien envió una carta el 27 de marzo a la licenciada Denise Garnier, comprometiéndose a respetar los derechos de propiedad intelectual de la Federación.

Con esta aceptación se preparó un borrador del acuerdo que justo cuando ya estaba listo para ser firmado fue detenido por Vargas, quien argumentó que el tema de las camisetas es cuestión de los proveedores y no de la empresa directamente. Sin embargo, las marquillas dicen: “exclusivas para Café Britt”.

Ante esta situación, la Federación intentó nuevos acercamientos, tanto desde Colombia como desde Costa Rica, para evitar un proceso más dispendioso, pero al no encontrar una conciliación optó por demandar a Café Britt la semana pasada.

Pablo Vargas, en comunicación por vía electrónica con este diario, dijo que no ha tenido notificación alguna de este proceso.

Como el tema de propiedad intelectual no tiene un panel de solución de controversias, estos procedimientos se deben regir por la normatividad local, por lo que este proceso puede tardar hasta tres años en la primera instancia, y en caso de que haya reposiciones podrá tardar mucho más de este tiempo.

La historia de que Juan Valdez toma café Britt, al parecer salió de que en alguna ocasión un cliente, que pagó con tarjeta de crédito, tenía este nombre, por lo que tiempo después en la compañía al ver el comprobante de pago se dieron cuenta de que Juan Valdez había comprado en Café Britt.

La Federación Nacional de Cafeteros de Colombia tiene la marca de Juan Valdez registrada en 80 países de Europa, Asia, África y América, en especial donde hay alto consumo y también donde se produce.

Según explicó Samper, la protección de la marca es tal, que en la mayoría de países del mundo hay catadores especializados que tienen la tarea de probar todo lo que se venda como ‘café 100 por ciento colombiano’, para verificar la calidad del grano y evitar que se mezcle y se venda como de buena calidad, ya que eso atenta contra el buen nombre.

Otras denuncias contra Café Britt

En Panamá y Perú hubo denuncias contra Café Britt durante los dos años anteriores.

En el caso de Panamá, la comunidad Kuna y el gobierno iniciaron una investigación contra la empresa cafetera porque estaban trasladando a indígenas Kunas desde su país para que produjeran en temporadas de tres meses, hasta siete mil molas, por un salario mensual de 200 dólares, al tiempo que venden las molas a 10 dólares cada una.

En el caso de Perú, se refería a que Café Britt Perú estaba comercializando imitaciones chinas de artesanías peruanas y se vendían a precios muy bajos.

Al respecto, el gerente de Britt, Pablo Vargas, explicó que en el caso de Panamá no conocía el caso denunciado y que en cuanto a Perú, la compañía se ha dedicado a eliminar a los intermediarios en la cadena.

“Además hay operadores de tiendas que quieren tener espacios en lugares turísticos como los que Britt posee y pareciera que esta situación crea incentivos para algunos intermediarios como para anunciar información negativa sobre Café Britt”, explicó Vargas a
través de correo electrónico.

Además, manifestó que Café Britt apoya a asociaciones de artesanos de Costa Rica y de Perú, tanto así, que incluso en su país son el mayor exportador de artesanías actualmente.

LUZ DARY MADROÑERO
REDACCIÓN ECONÓMICA